(madera de sicomoro y madera de haya 90x50x50cm (2007)

Todo lo que sucede, sucede en el espacio que media entre nuestros sentidos y las cosas. En ese espacio /tiempo, los acontecimientos se nos muestran, filtrados por nuestros condicionantes (cultura, origen, medio, desarrollo… Vida), de muy diversas maneras, tan diversas como microsegundos tiene una hora, y tan deformadas como admite nuestra capacidad de observación. La imagen que percibimos de esos acontecimientos, reflejada en la realidad, se nos devuelve lista para ser descifrada. Seremos nosotros, con nuestros propios filtros, (condicionados por nuestra existencia), los que terminaremos por reconstruir y volver a dar forma (y daremos forma definitiva) a nuestra realidad (puesta en relación con el resto de realidades).

Una silueta de mujer torneada en madera de haya, seccionada a la altura del busto. Allí se forma una plataforma, de acero pulido a espejo, sobre la que se depositan dos esferas.

En el perímetro de la plataforma, cuatro pares de manos orientadas en los puntos cardinales:

Norte: en una mano los utensilios de la liturgia doméstica (platos, vasos, tazas rodillo de amasar…), en la otra, con suavidad, se  abraza una casa.

Sur: Sobre cada mano descansa un huevo. Cada mano muestra un huevo que sujeta con descaro.

Este: Las dos manos agrarran un lápiz con dos puntas, no se sabe si quieren quebrarlo o mostrarlo.

Oeste: Una mano recogida extendiendo el dedo índice sobre el que baila una peonza. La otra sujeta con precisión una bolita.

Todo sucede entre nuestros sentidos y las cosas…